Para leer a Ian Stevenson hay que tener verdaderas ganas de estudiar, porque hay que concentrarse, tienes que poner mucha atención para no perder detalles. Su material es denso, cuesta. Contiene términos científicos que no son fáciles de entender para el común de los mortales. Aún no me he leído todos sus libros ni todos sus artículos, pero considero que conozco bastante bien su trabajo y por eso hay etapas que me olvido un poco de él. Y no debería hacerlo. Ian Stevenson es un referente para mí. Fue un auténtico científico, un auténtico Buscador de la Verdad como yo los llamo... un colega, para qué lo voy a negar. Me doy cuenta de que tenemos muchas cosas en común. Y me resulta muy curioso que los obstáculos que nos vamos encontrando por el camino son básicamente los mismos: la ignorancia, el materialismo, la burla... y, por supuesto, el fundamentalismo.
Cuando empecé en mi propio camino, creando un foro racional de reencarnación, ya dejaba muy claro que no era un foro basado en creencias religiosas o de la Nueva Era. No tardaron en llegar personas con influencia espírita, pero por suerte abandonaron el foro al poco tiempo, posiblemente al ver que mi abordaje era totalmente distinto. Por alguna razón el espiritismo está muy extendido en los países hispanohablantes. Tenemos el espiritismo “original” de Allan Kardec, pero también son muy conocidas las comunicaciones transmitidas por médiums varios como el brasileño Chico Javier, la americana Jane Roberts que canalizaba a un supuesto espíritu llamado Seth o las figuras de la Teosofía como Madame Blavatsky, solo por poner unos pocos ejemplos. Yo estudié someramente algunas de estas fuentes, lo suficiente como para comprender que había algo que no cuadraba: las contradicciones eran constantes en todas ellas, y además en muchos casos tales enseñanzas estaban muy influenciadas por la religión que profesaba el médium. Jamás me convencieron. Pero lo peor de todo es que hay personas que sí dan validez a estas "enseñanzas". Además muchas de ellos se deslumbran fácilmente por lo que se dice en esos libros y lo toman como la Verdad Absoluta. Se convierten en fundamentalistas. Ellos y yo tenemos en común que creemos en la reencarnación, pero nada más que eso. La diferencia fundamental es que yo me baso en hechos. Si es posible, hechos estudiados y verificados de manera científica como los casos presentados por Ian Stevenson en sus libros. Cuando no es posible, experiencias y testimonios de personas (incluida yo misma) a las que he seguido un tiempo y sé que son serias, personas normalmente con recuerdos espontáneos de vidas pasadas y que han investigado sus recuerdos para poder verificarlos históricamente. De ahí es donde extraigo mis conclusiones, y por ello considero que lo mío es algo más que una simple creencia.